«No tengo resultados y no sé si esto es para mí.»
¿Cuántas veces te han dicho esta frase como distribuidor de Network Marketing?
Cuántas veces viene una persona de tu equipo y te dice:
- No tengo resultados.
- Lo voy a dejar, es que es muy difícil, nadie me dice que sí, nadie confía en mí.
- Es que, el producto, es que la economía de país, es que la pandemia. ES QUE.
Quiero darte un rápido consejo para ayudarte en esta famosa objeción, como Networker vas a encontrar a personas que se desmotiven, que no se vean capaces y que pierdan energía cuando vean que los resultados no llegan todo lo rápido que esperaban. No es algo exclusivo de esta industria, pasa en la universidad, pasa en los negocios tradicionales, incluso en aspectos de día a día como en el gimnasio o en las dietas, comienzas con expectativas muy altas y luego llega la frustración cuándo no ves los resultados. De hecho, los verdaderos cambios se notan al año, como mínimo, si eres disciplinado.
En Network Marketing pasa lo mismo, es imposible que una persona sin experiencia en negocios, en liderazgo, en ventas, en influencia, en marketing, empiece un negocio y solamente en un mes viva de ello, sea millonario, sea un crack, sea influencer, ¡eso no pasa! Pero lo que marca la diferencia es, que las personas de tu equipo se enamoren del proceso, tal y como yo lo hice.
Yo te cuento como he llegado a tener resultados altos en Network Marketing, únicamente me he enfocado en trabajar todos los días disciplinadamente, alejado emocionalmente del resultado. No me enfocaba nunca en el rango, en el cheque, en la venta, en el “si” de ese nuevo distribuidor, me enfocaba en mí mismo, me enfocaba en dos aspectos que te quiero compartir.
Los verdaderos cambios se notan al año, como mínimo, si eres disciplinado.
En mi actitud y en mi actividad; si eres capaz de transmitir el valor de cuidar estos dos aspectos de tu día a día a tu equipo, pero primero a ti mismo, vas a ser capaz de mejorar las metas que te propongas. Las personas que buscan el resultado lo alejan y las personas que son capaces de enfocarse en la tarea, en el día a día, en el ABC, en crecer, en mejorar, consiguen el resultado.
Seguramente esto no es nada nuevo para ti, pero si no lo aplicas día a día es porque realmente no lo has entendido, quizá porque no hemos sabido transmitírtelo correctamente para que te llegase el mensaje, pero te puedo asegurar que cuidar tu actitud y tu actividad realmente marca la diferencia.
Entonces, cuando alguien te diga que no tiene resultados, dile sinceramente: “¿Y qué esperabas? ¿Quién te prometió resultados?”. A la universidad tienes que ir, cuatro o los años necesarios, para tener un título para después salir al mercado laboral y empezar de cero en cualquier empleo que decidas abordar y te enseñen de cero.
En los negocios es lo mismo. Vas a empezar uno, dos, tres, cuatro años, los que haga falta y después de ese tiempo, si eres constante y disciplinado y has controlado tu actitud y tu actividad, entonces prepárate por que empieza el show y podrás vivir 100% de esto. Pero si no estás dispuesto a pagar el precio entonces dedícate a otra cosa, diciendo esto siempre desde el respeto y con buena vibra.
Y recuerda, controla tu actitud y tu actividad, aléjate del resultado y cuando menos te lo esperes, los resultados llegan, porque has sido constante y has sembrado en silencio.
Te leo en comentarios, ¿aplicas el control de tu actitud y tu actividad o aún estás esperando que las cosas sucedan por arte de magia?
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